Espacios de trabajo centrados en la personas: flexibles y pensados para su privacidad y bienestar
“La oficina centrada en las personas” es un espacio de trabajo flexible donde los empleados están en el centro. Es una nueva alternativa a la oficina abierta en la que la prioridad son las personas, el bienestar y la flexibilidad, y que nos permite adaptar el entorno de trabajo en función del estado de ánimo que deseemos fomentar, las necesidades y preferencias individuales, con varias posibilidades de configuración para facilitar el trabajo que estemos realizando en cada momento.
Es un nuevo concepto que facilita los cambios estructurales y convierte la oficina tradicional en un espacio que puede adaptarse a diferentes estilos de trabajo, con zonas para colaborar y también para concentrarse, que es a la vez funcional, estratégico y estéticamente agradable. Es pasar de ocupar un espacio de trabajo determinado a compartir los distintos espacios de manera flexible. Es poder moverse libremente por la oficina para encontrar el lugar de trabajo perfecto en cada momento y mejorar así nuestra productividad.
Así pues, este nuevo modelo de oficina pasa a ser un espacio polivalente en el que el mobiliario y los elementos del diseño deben poderse adaptar a varias funciones. Preferiblemente, los muebles deben ser de materiales no porosos, con superficies antimicrobianas que sean fáciles de limpiar para garantizar la salud y la higiene. Asimismo debe disponer de zonas con distintos ambientes, que se pueden crear haciendo uso del color.
Son cada vez más las personas que se quejan de los problemas derivados de trabajar en una oficina de planta abierta: hay demasiada gente y es fácil distraerse con el ruido. Por eso, la acústica es primordial a la hora de diseñar este tipo de espacios, lo que significa que, a pesar de que hay que favorecer la colaboración, lo primero en lo que debe centrarse el diseñador es en optimizar la privacidad.