La combinación de lo clásico con lo moderno para garantizar una estancia singular
El hotel de 5 estrellas El Llorenç, está situado en el casco antiguo de Palma de Mallorca, en el excepcional barrio de La Calatrava, a escasos metros de la catedral y con unas excepcionales vistas al mar. En 2019, este sorprendente y acogedor hotel de diseño abrió sus puertas dejando ver al mundo cómo combina a la perfección lujo, diseño y confort.
El diseñador sueco Magnus Ehrland, buscaba un estilo atemporal y auténtico que perdurase en el tiempo. Combinando diferentes azulejos con patrón de estrella árabe, añadiendo diseños botánicos y diferente vegetación, Ehrland logró un diseño extravagante, lujoso y único. Además del diseño, el hotel tiene rasgos especiales como el reto con el que se topó el arquitecto Pedro Rabassa, cuando se halló un horno árabe del siglo XI durante la construcción y que finalmente incorporó en el diseño del hotel.
Los servicios del hotel brindan al huésped la mejor de las experiencias
Combinando las particularidades del diseño clásico, con algunos aspectos innovadores, Ehrland logró fusionar a la perfección la fachada original del hotel junto con el diseño lujoso y exótico del interior. El Llorenç cuenta con treinta y tres habitaciones con unas vistas extraordinarias a la Bahía de Palma y al Parc de la Mar, y todas ellas cuentan con un diseño atemporal que combina distintos tonos cálidos y tranquilos con el recurrente suelo de estrella árabe.
El Hotel tiene dos restaurantes, Tannur y Dins. Por una lado, Tannur es la opción más casual, ofreciendo comida típica mallorquina y mediterránea durante todo el día. Por otro lado, Dins, que cuenta con una Estrella Michelín, brinda una experiencia gastronómica al cargo del reconocido chef isleño Santi Taura. Este restaurante ofrece una atmósfera más íntima para los comensales y cuenta con un mostrador de show-cooking, donde se puede ver a los cocineros mientras preparan la comida y la exposición del horno árabe del S. XI.
Otro de los excepcionales servicios que brinda el hotel, es un spa que recuerda a los hammams árabes y a los tiempos pasados del barrio de la Calatrava, que sigue manteniendo componentes característicos del diseño y arquitectura árabe. El spa alberga una piscina climatizada de 14 metros, una sauna y un baño turco, que harán que los usuarios desconecten del mundo exterior y disfruten de la experiencia más confortable dentro del hotel.
En la azotea, a la altura de la impresionante Catedral de Mallorca, se encuentra un oasis dentro de la ciudad. Con la infinity pool más larga de Palma y los distintos espacios de ocio y relax, los huéspedes pueden disfrutar de unos cócteles con unas excepcionales vistas al mar o a la ciudad.
Acústica alineada con diseño
Para controlar la acústica y mantener el confort y el bienestar de los huéspedes, se optó por implantar un tratamiento acústico en las zonas comunes del hotel. Al tener unos estándares de diseño tan altos y exigentes, se incorporó Rockfon®Mono® Acoustic en los restaurantes, en el spa y en la recepción para no comprometer la visión de diseño, ya que esta solución se amoldaba y encajaba a la perfección con la estética del hotel.
Palma de Mallorca
Plaça de Llorenç Villalonga, 4,
07001 Palma, Illes Balears,
España